Accesorios

Aquí te explicamos los diferentes accesorios que puedes llevar durante tu peregrinación, los materiales necesarios para ésta y la manera correcta de llevarlos.

     BASTÓN:Resultado de imagen de caminar camino santiago CON BASTON

Si caminas con un solo bastón, es conveniente cambiarlo de mano de vez en cuando para repartir el esfuerzo entre los dos brazos.

Si caminas con dos bastones, el cuerpo trabaja mejor, pero hay que prestar mayor atención a la coordinación. Además, abusar del uso de los bastones puede alterar tu equilibrio natural al habituarte a puntos de apoyo adicionales.

Lleva el bastón adecuado al tipo de terreno: en llano debes tomar el bastón a la altura del codo, con el brazo doblado en un ángulo recto; si caminas cuesta arriba, hay que agarrarlo más abajo y hundirlo en la tierra para usarlo de empuje hacia arriba; y si caminas cuesta abajo es recomendable ponerlo a la altura del hombro y clavarlo por delante del pie para descargar el peso sobre el brazo.

     MOCHILA:

La mochila debe ser la adecuada para ti. debe tener un diseño ergonómico y adaptarse a tu cuerpo. Es muy importante que elijas una talla adecuada y que el peso bruto de la mochila no sobrepase el 10% de tu peso corporal. Además, debes seguir las siguientes pautas:

  • Elige una mochila trekking lo más ligera posible y de poca capacidad. Nunca uses mochilas de montaña o escalada. Si ya estás haciendo el camino no importa, adapta la que tienes y póntela a medida.
  • La mochila debe distribuir el peso a lo largo de los hombros, espalda y caderas (no deben existir puntos de máxima presión). Debes repartir el peso de forma vertical.
  • Tienes que colocar los objetos más pesados cerca de la espalda, para evitar que la mochila no tire hacia atrás.
  • El peso de la mochila debe ser soportado por las piernas, no por la espalda. Procura que se apoye en las caderas y ejerza la mínima presión en los hombros. Para ello, ajusta la mochila de forma que no se mueva pero que no apriete.
  • Debes adaptar la mochila de forma que las hombreras se unan a la mochila a unos 5- 7 cm por debajo del punto más alto de los hombros.
  • Evita llevar bultos colgando de la mochila. Esto produce descompensaciones laterales y mayor fricción aerodinámica 
  • La mochila debe permitirte tener total libertad de movimientos.
  • Comprobar que la mochila cuenta con acolchado en todas las partes de contacto con el cuerpo, así como con un cinturón lumbar ancho (también acolchado).
  • El material debe ser de fácil transpiración.
  • Debes cargar la mochila de forma que su centro de gravedad quede lo más alto posible. Para ello, se cargará la parte más pesadamochila cerca de los hombros. Es aconsejable tener el 80% del peso en tus caderas y el 20 restante en los hombros.
  • Todo aquello que es imprescindible durante el camino como la bebida, chubasquero… colócala en la parte de arriba o en los bolsillos exteriores.

Como hemos indicado, la mochila debe ser lo más ligera posible y de poca capacidad. Así que hay que debes reflexionar sobre ¿QUÉ LLEVAR EN LA MOCHILA?

  • Ropa (ver el punto Ropa de Verano).
  • Un pequeño botiquín en el que todo será del tamaño mini: imprescindible Betadine, alguna gasa, tiritas, tijeritas, amoniaco, repelente de insectos y protector solar.
  • Productos de aseo de tamaño mini, incluyendo tapones para los oídos y una toalla de microfibra (que ocupan y pesan menos que las de algodón).
  • Documentación personal: D.N.I., tarjeta de la seguridad social, tarjeta del banco, credencial del peregrino.
  • Un resumen de alguna de las guías del Camino que esté actualizada.
  • Móvil: es prescindible, pero si viajas solo será un importante elemento de seguridad.
  • Material adicional: aguja e hilo, una pequeña linterna frontal, una funda de cojín (por cuestiones higiénicas), detergente para lavar la ropa, pinzas para tenderla e imperdibles para colgarla de la mochila si al día siguiente todavía no está seca. También una cantimplora, pañuelos de papel, papel higiénico, un reloj con función de despertador, dinero y tarjeta de crédito.

     CALZADO: 

Necesitas un calzado ni muy ligero ni muy pesado, que sea flexible y que aporte una buena estabilidad. Todas estas características las reúnen las zapatillas de trekking y el calzado trail running que utilizan los corredores de montaña. Ambas son más ligeras que las botas de senderismo y aportan mayor flexibilidad y amortiguación.

Consejos:Resultado de imagen de calzado camino de santiago

  • Deben ser cómodas así que pruébalas en la tienda todo el tiempo que consideres necesario y con el tipo de calcetines que vayas a utilizar.
  • Deben sujetar bien el pie aunque no pueden quedar demasiado ajustadas en la punta. Hay que dejar un espacio para que los dedos no choquen con la bota al andar en bajada.
  • El material de la suela debe tener buena adherencia, amortiguación y ser resistente.
  • Nunca uses unas botas sin estrenar en una excursión porque seguramente os saldrán rozaduras y/o ampollas. Úsalas antes en trayectos cortos para acomodar las botas a vuestros pies.
  • Deben de tener un tejido que transpire bien y que además sea impermeable.

     ROPA EN VERANO:

  • Zapatillas, sandalias o botas de verano de trekking. En esta época se desaconsejan las botas de materiales impermeables porque podrían recalentar el pie demasiado.
  • Chanclas de goma para la ducha.
  • 3 Pantalones: ligeros y de secado rápido. Al menos uno de ellos largo. También son una buena opción los pantalones con perneras desmontables.
  • 3 Camisetas o camisas: ligeras y que se sequen rápido.
  • 1 Jersey o forro polar.
  • 3 o 4 mudas de ropa interior.
  • 4 o 5 pares de calcetines de fibra anti-ampollas o de algodón. En este segundo caso tardan algo más en secar y es mejor cambiarlos 2 veces al día.
  • Sombrero o gorra para el sol.
  • Chubasquero o poncho para la lluvia.
  • Un bañador. A lo largo del camino puedes encontrar piscinas o ríos en los que quizá te apetezca darte un chapuzón.
  • Gafas de sol.

      SACO DE DORMIR:

Es imprescindible que lleves un buen saco de dormir, pero lo más ligero posible. En los albergues hay camas pero necesitarás poner tu saco encima. Además, es posible que en alguna ocasión estén llenos y tengas que dormir en otro sitio como un polideportivo. En verano con uno de +15 grados de confort es suficiente, que pese aproximadamente 700 gramos. Para otras épocas del año puedes necesitar uno de +10 o +5, pero que no supere el kilo de peso.

25 abril 2017